Es difícil hacer comprender a alguien que me conoce como ciertos estilos musicales pueden hacerse hueco en mis gustos particulares. Siempre he sido del rock duro, mucho de heavy y ghotic rock y sin embargo, se hacen un nombre ciertos grupos o solistas que rompen las normas de los gustos al uso.
En el caso de esta banda debo confesar que mucho ha tenido que ver el nombre de su cantante, Jared Leto actor de cine, me fascinó desde su primera intervención en la gran pantalla; me iluminó poética y literariamente en su papel de Hefestión en la Magna Alejandro; me conmovió en sus dos trabajos posteriores donde su primer papel le hizo coger muchos kilos para llevarlo a cabo y en su última intervención en la pantalla, en la que hace el papel de drogadicto.
Y en un rebote de rebeldía de este bello hombre (digo bien bello, porque tiene el título por dos años seguidos del Hombre Más Bello del Mundo) se metió a cantante y formó junto con su hermanastro y un hombre más, esta singular banda de 30sg to Mars. La verdad es que las letras de sus canciones llevan un mensaje que rompe moldes a pesar de estar acompañadas de músicas fuertes y potentes y en otras se convierten en baladas.
Siempre le he visto como un hombre fuera de su tiempo. Jared tiene casi 39 años pero la mentalidad de un hippy de los años 70,s. Incluso sus poses y vestimentas en algunos casos nos devuelve la gloria de quienes vivimos estos años en directo. Jared nos lleva a esa sensación en todos sus discos con nombres de protestas antimilitares, consumistas y ecologistas. Lo dicho, un hombre fuera de su tiempo al que entiendo muy bien. Y si además pone en cada directo toda una parafernalia y un look que puede resulta unas veces rompedor de mal gusto o incluso dejarte con los ojos desencajados de tanta belleza; tenemos un grupo que ahora está de tour por todo el mundo sin tener en cuenta credo ni política.
Este disco es todo un alegato antibelicista. La Guerra, quizás está influencia por aquella guerra de Jim Morrison, pienso que ésta es su raíz, porque Jared tiene como Jim cierta fijeza antibélica. Los vídeos que se han hecho de los tres singles que van hasta ahora están considerados como obras de arte plástica y este último de Kings y Queens opta a premios 2010 en todas sus modalidades en la MTV.
Hay cierto alboroto musical en todas sus composiciones de las que es autor y compositor; comienzan con un lento y penetrante mensaje y después se desmadra con la guitarra entre sus manos chillando consignas o resoluciones a los problemas. Es Jare Leto y la banda prácticamente es él en toda su plenitud.
Es un grupo que rompe moldes, no van de matones, ni de destrozadores de habitaciones de hotel, Jared es educado, habla de forma correcta, atiende a los periodistas, se muestra encantador con los fans, es puntual y ha tenido varias facetas en su vida que han ido cambiando con el look tan variado que ofrece en el escenario.
Desde aquella visión hippy que no ofreció en el primer disco, se nos volvió un poco luchador estelar y después un retoque de Kurt Cobain con pelo teñido y gafas de montura blanca, después se nos volvió gótico o demo quizás en el período más, digamos «grosero», de su presentación pública. Entonces se volvieron peligrosamente violentos con gestos y palabras fuera de lugar. Y volvió a convertirse en ese ángel que viene a salvar el mundo aunque lucía un cresta roja y rubia muy al estilo de Tokyo Hotel aunque le separa más de 20 años de su cantante.
Ahora le hemos visto en su concierto en Tel Aviv, donde arrasó y en dos festivales europeos en que la música electrónica es la reina. El éxito ha sido total y la presentación de su último trabajo ha tenido una sonada aceptación a nivel de críticas y de ventas.
Desgranadas una a una las canciones no podríamos hacer una crítica por separado; creo que son actos de una misma obra de teatro. Magistralmente configuradas y puesta en riguroso orden para que el oído se vaya acostumbrando a cada mensaje, a cada son de guitarra, a cada susurro de Jared. Buena música para llevar en el coche en un largo traslado sin atender a prisar ni a malos gestos. Cortes lentos, letras cargadas de mensajes, quizás casi en poesía venidas a más. Y en directo la locura….
El diseño de su carátula quizás lleve impreso el lema de la banda, el tigre que enseña los dientes pero que está ciego por lo tanto muestra violencia como protección pero no se sabe si su mirada está cargada de odio o pasión. Digamos que mucho de Jared lleva también esa gran foto, porque los ojos de Jared son algo imposible de definir.
Y para comprender más aún lo que este disco significa, vayamos a la costumbre de su autor que está en continuo contacto con sus fans a través del Twitter o del facebook, donde sube fotos que hace con su móvil de cualquier cosa que puede estar ocurriendo a su alrededor en cualquier momento. Fotos sobre si mismo y los lugares que visita en todo el mundo. Crónicas sobre los países que visita y lógicamente que piensa sobre los conciertos que da casi al mismo momento en que los termina.
Utiliza el chat directo para que los seguidores les hagan preguntas y sobre lo que piensa de los conciertos que da en lugares tan dispares. Podemos decir que es un hombre que tiene el pulso de lo que ocurre alrededor suya.
Para verlo en directo tenemos dos fechas en España; el 17 de diciembre en Madrid en Vist Alegre y el 18 en Barcelona en el San Jordi.
Para conocer un tipo de música diferente y conocer a un comunicador nato. Realmente diferente.
DAMADENEGRO 23/8/2010
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